Después de adquirir en 2007 los edificios protegidos de la década de 1960, FREO maximizó el potencial de la propiedad remodelando una torre protegida existente y construyendo una nueva promoción de locales y oficinas en Kurfuerstendamm, creando una zona comercial y de oficinas de 16.600 m2 en total. Además, FREO reposicionó el edificio como un activo inmobiliario destacado consiguiendo arrendatarios de marcas de lujo, una sala de exposiciones de Audi y una selección diversificada de los arrendatarios de oficina.
Los edificios se vendieron en 2013 a un fondo institucional alemán.